sábado, 4 de abril de 2009

¿Sabés que podés hacer con tu domingo de ramos?

A ver si nos entendemos. ¿Quién carajo se creen que son? Esta mañana aparecieron por BABEL dos señores en representación de la parroquia de nuestro pueblo. Resulta, que como el único olivo que hay en esta ciudad se encuentra en medio del parque del hostel, parece que tenemos que donar sus ramas a la Santa Iglesia para la festividad de este domingo. Todo bien pero, si el pelotudo que viene a llevarse el botín me va a cagar a pedos porque las ramas están demasiado podadas y dificultan su tarea para alcanzarlas (además de tener que prestarle, acomodarle y sacarle la escalera) diciéndome que así no se hace, que así él no puede, que hay que dejarlo más a mano y no sé cuántas idioteces más, el año próximo, cuando venga a buscar sus ramitas, el olivo no va a existir más porque lo arranco de raíz.
Yo digo, encima que entrás, pedís, reclamás, afanás y criticás, vas a tener el tupé de vender este domingo cada ramita a 5 mangos. Sos un hijo de puta.

lunes, 2 de marzo de 2009

BABEL

No voy a volver a subir fotos ya que las han visto antes. Simplemente los espero acá. A ustedes, a todos. Saben, que cebo ricos mates y que hago unas empanadas pa chuparse los dedos.


www.babelhostel.com.ar

lunes, 23 de febrero de 2009

Ceguera

Tuviste la feliz idea de volver a hablar de ella. Hacía días ya que venías nombrándola. Contaste, entre amigos, algunas anécdotas de viejas épocas. Yo sonreía pretendiendo que nadie notara mi incomodidad. A veces quiero superar algunas cuestiones, pero me es imposible. Hubo un tiempo en el que solía revisarte los bolsillos y tu casilla de correo. Hace mucho que dejé de hacerlo. Decidí concederte el beneficio de la duda.
Hasta ayer, que la certeza se presentó ante mí recobrando viejos fantasmas. Ella tocó a la puerta del hostel y yo abrí incrédula. No esperaba verme, supuso que yo no la reconocería luego de tantos años. Me preguntó nerviosa por la altura de una calle, si estaba cerca o no. Le contesté que no tenía idea, mientras ella, cabizbaja, se alejaba hacia la esquina. Llevaba a un nene de la mano. De unos siete años. De unos ojos tan verdes como los tuyos.

miércoles, 18 de febrero de 2009

Misceláneas

Hace una semana mi hija terminó una toma de antibióticos que le llevó diez días, mucho capricho y llanto cada ocho horas.
Ayer, nuevamente, comenzó con otra toma por otro problema.
Esta tarde, cuando vuelvo de trabajar, le sirvo sus 8 ml. de jarabe y se lo acerco junto con un vaso de jugo.
Me mira con cara de odio y me dice: -Mamá, ¿No te das cuenta de que me estás arruinando la vida?
Por suerte, hoy empecé con la nueva psicóloga...

viernes, 30 de enero de 2009

Ya casi, ya casi

En breve, abriremos las puertas. Aunque aún no tiene nombre, es el reflejo de mi personalidad.
Éste, es el hostel. Y bienvenido sea el que quiera venir.
Pasen y vean...









sábado, 17 de enero de 2009

Mal hablada

Como diría mi amiga Claracristina, ésto me pasa por putear tanto. Ayer me lavaron la boca con lavandina. Eso mismo con lo que tantas veces se amenaza a los niños para que no digan malas palabras me sucedió. Después de dos días de insoportable agonía por culpa de un dolor de muelas que no me dejó vivir, mi dentista me dijo: Ahhh....pero mirá la infección que tenés....
Y claro pelotudo, cómo no voy a tener infección si hace un mes que tu colega me está haciendo un tratamiento de conducto y en vez de dejar la muela destapada me pone pasta hasta en el culo.
Yo dije el primer día que me atendió, que ese infeliz de endodoncia no sabía un carajo. Y acá están las pruebas. Ya me vio cuatro veces, sigue probando con las limas y matándome con la anestesia para decirme que tengo los conductos calcificados y que no puede bajar más. Y como si fuera poco, en la última visita descubrió que la muela tiene cuatro conductos en vez de tres. Y qué hizo con semejante descubrimiento? Nada. Como no podía ser de otra manera, con tanto toqueteo, el cuarto nervio se fue al carajo más la tapadita, colonia de bichos chochos de joderme la vida.
Y vuelvo a mi dentista para que trate de defender lo indefendible, obvio, qué iba a hacer si el otro idiota es su socio...No te preocupes que yo te saco el dolor.
Claro, para limpiar semejante chiquero fue necesario aplicar dos jeringas tamaño jirafa de algo que me advirtió "tiene mal gusto". Bueno...qué puede ser peor que este dolor???? Cuando me enjuagué le dije que tenía gusto a lavandina y contestó y si...es hipoclorito....no me puedo arriesgar, es lo único que te va a limpiar bien.
Hijo de puuuuta....me quemó toda la boca, tengo todo el interior de la boca, lengua incluida, hinchado y quemado como si me hubiese chupado la lavandina del pico. Pero bueno, por lo menos ahora no me duele la muela.